Discusión: formar docentes para la observación
PREGUNTA: ¿Consideraron Uds., la preparación específica en educación musical de las educadoras con el fin de prepararlas para continuar a futuro autónomamente el mismo trabajo?
DELALANDE. No era el primer objetivo pero la investigación llevó a participar activamente también a las educadoras; ellas aprendieron que se podía observar las exploraciones de los niños, permitir y dejar que los niños exploraran libremente, colaboraran entre ellos, etc., y reflexionar sobre esas exploraciones, etc.
En el 2° año nos dimos cuenta de que los dispositivos (medios/ instrumentos/ accesorios/ disposición en el espacio de 1, 2, más niños, etc.) permitían situaciones de exploración y facilitaban ciertas conductas activas y positivas por parte de los niños, inclusive de aquellos tímidos que no habían hecho nada, que habían quedado al margen en los años anteriores (siendo en todos caso una minoría) superando la inhibición de un año antes.
Hay todo un campo experimental por hacer en la formación de las educadoras en esta área. Durante la investigación las educadoras comenzaron a inventar situaciones nuevas, como por ejemplo colocando muchos instrumentos en línea en uno de los pasillos de la Sala Cuna o en una sala para permitir que los niños encontraran los instrumentos cotidianamente.
Nos dimos cuenta de la importancia de los dispositivos o medios que permitieran a los niños superar sus inhibiciones, estimulando su participación. Ellas mismas descubrieron y propusieron situaciones para mejorar y favorecer la participación de los niños. Y todas estas etapas significaron formación para las educadoras, sin duda alguna.
SERGIO CANDIA. Desearía hacer una reflexión. Uno de los objetivos que nos hemos planteado con este curso es justamente pensar a la formación de profesores y educadoras y, siguiendo lo que François expuso, pienso que es muy importante adquirir técnicas de observación sistemática por parte de los profesores. Esto facilitaría que se nos ocurran situaciones, dispositivos, contextos que permitan que aparezcan ante nosotros -observadores activos- las conductas que construyen los mismos niños.
No es diferente lo que hacemos en la formación de músicos. Mi experiencia como formador de intérpretes me ha enseñado a observar al estudiante y eso debería servir para todo tipo de profesor. Tanto mejor es la clase si se tienen buenas técnicas de observación: ¿qué hizo el alumno, cómo lo interpretó, a qué está dando importancia, qué estructuras está percibiendo o concibiendo? A partir de esa capacidad de observación del profesor se puede no sólo imaginar nuevas estrategias sino además se posibilita que el alumno construya algo por sí mismo y no copie un modelo que se está dando. Debería tenderse a que descubra y uno pueda ir ayudando en esa construcción poniendo en común la propia experiencia.
Mi experiencia como músico y como psicólogo es que basta con tener una muy buena y fina técnica de observación para ser buen profesor, la capacidad de comunicar y conectar esas observaciones y casi nada más se necesita para hacer una buena clase. .
Es tarea del profesor observar y saber detectar distintos elementos propiciadores del aprendizaje. Pero no es labor mía (como profesor) ordenar esos elementos; es una labor que hace el que aprende. Son los estudiantes y los niños que deberían saber ordenar esos elementos.
Los profesores generalmente están empeñados en la entrega de contenidos y en cambio olvidan la acción de observar, que consideran –quizás- no activa. Al contrario, me parece que la acción de observar es activa, todo lo que François nos ha mostrado implica ya en el análisis una gran cantidad de veces que hay que volver a observar, desde muchos puntos de vista. Lo mismo debería ocurrir en nuestras clases, se debería empezar a observar, escuchar y a encontrar en la conducta musical de niños y estudiantes gran cantidad de elementos que estaban ahí y no lo habíamos visto ni escuchado antes. ¿Cómo podemos enseñar algo si antes no lo hemos visto, escuchado, observado? Creo que este es un aporte fundamental en la formación de pedagogos, profesores y educadoras, la capacidad de observar, activamente.
DELALANDE: Nada que agregar; todo lo dicho es perfecto. ¡Muchas gracias!
A continuación quiero contarles que en Florencia me pidieron hacer un curso de formación musical de las educadoras: entonces preparamos un tipo de curso de Observación incluimos los videos que habíamos hecho con las educadoras y los niños. Observamos, analizamos con ellas, comentamos los videos y esta fue la base del curso. En lugar de curso de formación musical, fue un curso de observación.
Con los grandes de conservatorio es otra situación. Pongo el ejemplo de un curso de composición: allí no se trata de decir al alumno “lo que debe hacer”. Allí se trata de ayudarlo de ir en la dirección que él ha elegido. Luego de observar lo que ha hecho y de felicitarlo sería bueno tratar de entender lo que el estudiante desea, aconsejarlo de cómo avanzar, darle pistas de cómo desarrollar algunas buenas ideas, aconsejarle de escuchar tal o cual obra si no la ha escuchado,....etc.
Enseñar composición es más difícil porque quien enseña no puede imponerse sino debe dar espacio a la creatividad del alumno....dejar que él haga por sí mismo .En todo caso hay toda una pedagogía de la composición bien desarrollada en el Conservatorio de estudios superiores.
OLIVIA CONCHA. Deseo relacionar estas dos intervenciones, la respuesta que dio François sobre formación y rol de las educadoras en esta investigación italiana y el comentario de Sergio sobre la capacidad de observación. Quiero vincular esta actitud de la educadora que está muy presente y activa en las Escuelas de la Infancia de Reggio Emilia que uds ya han comenzado a conocer en Chile; allí, en mi opinión, las educadoras no enseñan. Una gran parte de su labor consiste en observar a los niños con mucho esmero, tomando notas y registrando lo que ellos hacen al igual como se ha visto en esta investigación. Allá se considera que el niño sabe si lo dejamos hacer. Y tal vez si consideramos aquella metodología y ésta que hemos visto acá en ambos casos se trata de observar y luego reflexionar sobre lo que ocurre entre los niños. Algo diferente a lo que se hace en nuestro país.
Pareciera que ha llegado el momento de detenerse a pensar y no seguir cayendo en el síndrome más preocupante, para mí: aquí la educadora y el profesor están preocupados de “enseñar”. Tal vez ha llegado el momento de aprender de los niños, de los adolescentes, de los jóvenes, observándolos, que debería ser la primera actitud del investigador. Quien observa ve, mira, escudriña. Quien oye no escucha, tiene que aprender a escuchar. Y luego se analiza lo que se ve, se escucha. Esa es la esencia de la pedagogía de la creatividad pedagógica, pienso yo, en Reggio como aquí se ha demostrado.
trans. ocm / 2015
Para profundizar :
En italiano: Delalande, F (a cura di) 2009, La nascita della musica: esplorazioni sonore nella prima infancia
En francés: 2015, Naissance de la musique, les explorations sonores de la première enfance
Con dos DVD de los que son extraídos los fragmentos presentados aquí. Esta conferencia es sólo la " banda anuncia " de este libro.