Explorar, ya es escuchar

Hasta ahora nosotros hemos hablado sobre todo de la producción sonora; hoy quisiera hablar de la escucha, de la recepción; el video era solamente para mostrar de que cuando se están produciendo sonidos, naturalmente se están también escuchando. No hay una necesidad de hacer una pedagogía de la escucha. Hay que ayudar, pero el punto de salida es que escuchamos naturalmente.

Este ejemplo me gusta mucho porque hay una parte de exploración del niño que no percute solamente el platillo suspendido sino que también explora y percute el pedestal que lo sostiene, entonces se trata de una exploración del objeto completo y todo centrado sobre todo en el sonido, el ejemplo es muy claro. Hay quienes hablan de una pedagogía de la escucha como si los niños no escuchasen pero la idea es clara, la escucha es natural.

El problema siguiente es como mejorar la escucha. Hemos hablado de dispositivos, de amplificación: efectivamente al usar un micrófono se concentra más la atención en la escucha, al sonido más que en el gesto que lo produce. El fenómeno del micrófono separa el sonido del objeto material, favoreciendo la orientación de la escucha. La idea general es que hay dispositivos que ayudan el desarrollo de la experiencia auditiva.

Vamos a observar un ejemplo de dos niños de 4 años que se escuchan uno al otro.

Como ven el material que están explorando es sencillo, no ofrece muchas alternativas pero lo que interesa aquí es la concentración y el interés que tienen ambos por escucharse mutuamente. Entonces para favorecer una pedagogía de la escucha es oportuno iniciar desde la producción del sonido, luego colocar a los niños en situación de escucharse uno al otro por ejemplo donde funciona el juego de imitación y estímulo recíproco.

Recordarán el ejemplo de ayer donde había muchos niños trabajando produciendo y escuchando su música colectiva, en ese caso estábamos ante un ejemplo más complejo pero no hay tiempo para tratarlo en este momento. En este caso estamos frente a un primer nivel de la escucha donde los niños juegan a explorar instrumentos y se miran uno al otro, se imitan, se concentran en el juego y se escuchan uno al otro. Quería demostrar que los niños a los 4 años son capaces de encontrar interés cuando tocan juntos, se escuchan uno al otro. Es un primer nivel de escucha concentrada.